• Menu
  • Menu

Escapada Bohol


Escapada Bohol

Acceso

Google Maps

Accedí en avión desde Manila al aeropuerto de Tagbilaran (en la isla de Bohol) y salí con avioneta, de 6 personas, hacia Cebú para luego coger avión pequeño hacia Siargao.



Bohol (Filipinas)

Filipinas era uno de mis sueños. A menudo me llegaban fotos de playas paradisíacas y naturaleza exuberante de este país exótico y esto hacía que estuviera segura que visitarla sería un éxito. Y así fue.

No olvidemos que es un archipiélago de 7.641 islas. No es fácil elegir cuáles visitar. Hay tantas que se renuncia a un volumen demasiado alto. Todas tienen su encanto, cada regala una experiencia diferente al visitante. Por el tiempo que iba, sólo podía elegir tres y no sabéis lo que me costó decidirme! Un factor que, a menudo, ayuda a decidirse es la facilidad de acceso o de desplazamiento entre las islas. Hay que tener presente que el turismo se concentra en lugares tan típicos como El Nido; pero hay muchos otros destinos que están poco explotados y el acceso no es tan fácil.

Pienso que escogí perfecto! Bohol, SiargaoCoron. Sí... renuncié al Nido! Me dejé llevar por los asesores de Bontur y fue perfecto. Bohol me regaló naturaleza a lo bestia, Siargao un ambiente de surf, juvenil y desenfadado y Coron unos paisajes que nunca borraré de la retina.

En el link del mapa se ve el detalle de los destinos que visité en Bohol.

Aunque uno de los máximos reclamos turísticos de la isla es el submarinismo en la zona de Panglao, yo fui a disfrutar de su flora selvática del interior y la curiosa fauna de los Tarsiers. Hay dos hechos históricos que marcaron a la gente de la isla: el terremoto de 2013 y su pasado de la época española. Son dos momentos que a menudo salen en las explicaciones de cualquier monumento histórico.

Llegué a Tagbilaran Airport desde Manila. Menos mal que no lo analicé bien hasta la marcha, sino me hubiera quedado a vivir allí. Pesan las maletas con básculas de comida y las tarjetas de embarque se hacen a mano. No están preparados para el turismo y lo que se ve genera cierta inseguridad...

Una recomendación muy valiosa: intente pasar por BQ Mall para comprar lo que necesitéis o lo que, sencillamente, os habéis olvidado. Es un centro comercial en el centro de Tagbilaran donde se puede encontrar de todo, incluso pasteles de color azul cielo! En el resto de la isla es difícil encontrar cosas.

Borja Bridge es uno de los dos puentes que unen la isla de Bohol con la de Panglao. Como yo tenía el hotel en Panglao (hay tanto hoteles aquí que incluso tiene un aeropuerto internacional), lo crucé en repetidas ocasiones y, sinceramente, me pareció fascinante. No es bonito, ni está cuidado; pero tiene mucho encanto y mucha vida. Todo tipo de vehículos cruzan el puente varias veces al día y todos llenos de gente y de materiales diversos. Las casas de los alrededores están enfocadas de cara al río y están en estado decadente, pero junto con las barcas de los pescadores le dan un encanto especial al lugar.

Isla de Panglao:

Nada más cruzar el puente, se llega al municipio de Dauis. La Church of Our Lady of the Assumption (Dauis Church) es de visita obligada. Data del siglo XIX y es fascinante. Me atrevo a decir que es una de las iglesias más bonitas de Bohol. El interior es muy ancho y bonito. Me encantó la cúpula en forma de pirámide octogonal. El interior, de hecho, es curioso: austeridad en las paredes y los techos con pinturas y decoraciones muy bonitas. Es frecuentada por peregrinos, pues dicen que el agua del interior tiene poderes sanadores. La iglesia sufrió mucho durante el terremoto, pero ahora está en muy buen estado. Se ha reconstruido hasta 5 ocasiones. El exterior, y sin saber de arte, me pareció que tenía una mezcla de estilos. Está ubicada en un parque que hay delante de un embarcadero muy auténtico. Muy cerca está la Dauis Watchtower, que es una torre de observación que está cerrada a los visitantes. La iglesia y la torre le dan un aire majestuoso a una zona algo decadente. La mezcla me encantó.

La siguiente parada es la Hinagdanan Cave. Es una cueva iluminada de forma natural; los rayos de sol se filtran por los agujeros del techo. Tiene un lago en el interior y muchas estalactitas y estalagmitas. Sinceramente, me sobran los turistas con los flotadores y los palos de selfie dentro del lago. Visita que sería perfecta sin gente.

Tuve la suerte de visitar Bohol a principios de Noviembre, esto me permitió vivir y ver sus rituales para el día de todos santos o el día de los muertos. Me llevaron al Panglao Cemetery #3 y es una de las visitas que más me impactó. En el cementerio se diferencia claramente las dos clases sociales: los de clase baja y los de clase media-alta. Los primeros tienen tumbas individuales en el suelo o dispuestas en vertical. Llevan carpas y tiendas de campaña y montan la parada para pasar unos días rezando por los difuntos. Los segundos tienen casitas construidas con las tumbas de todos sus familiares dentro. Las casitas están cerradas con rejas para evitar que nadie pueda entrar en su ausencia. Los unos no se mezclan con los otros; pero todos hacen lo mismo: pasar horas sentados comiendo y bebiendo haciendo compañía a los difuntos.

Muy cerca del cementerio hay St. Augustine Parish y la Panglao Watchtower. Es muy curiosa la similitud entre este par iglesia-torre con el par ubicado en Dauis. Son visitas que no las tenía marcadas en el mapa para hacer y, en cambio, me encantó cuando me llevaron. Al lado está el Panglao Island Sunset View Boulevard. Es un boulevard que hay entre manglares y palmeras donde se puede disfrutar de vistas de las Bangka (barcas típicas de Filipinas).

Me alojé en el "Amorita Resort" (del que haré una publicación en breve). Es un hotel monísimo, muy recomendable sin ser económico y está ubicado en una de las playas más conocidas de la isla: Alona Beach. El hotel tiene unas escaleras directas hacia la larga playa. Es de arena blanca y fina. Está llena de palmeras, de resorts y centros de actividades acuáticas diversas. Es un lugar frecuentado por los amantes del submarinismo. Vi una puesta de sol fantástica. Bagobo Beach es otra playa accesible desde el hotel (con escaleras de madera). Está justo al otro lado y es la antítesis de Alona. Pequeña, solitaria y no es tan paradisíaca. Tiene rocas en la arena y no tiene ni una palmera. Sin embargo, me encantó. De hecho, aquí me pasé más tiempo. El hotel ha dispuesto unas tumbonas que hacen que el tiempo pase volando!

Isla de Bohol:

Una de las visitas más típicas es la del Philippine Tarsier Sanctuary. Son unos animales pequeños con ojos muy redondos. Caben en la palma de la mano, giran la cabeza 180º a cada lado, pueden hacer saltos de hasta 5 metros, mueven las orejas a la dirección del sonido, un solo ojo es más grande que su cerebro y tienen unos dedos larguísimos. Son animales nocturnos y no es bueno molestarles durante el día. Pueden llegar a suicidarse cuando ven que pueden ser cautivados. Son solitarios y territoriales (cada uno de ellos necesita una hectárea)... Son muy curiosos, ¿verdad? Están en peligro de extinción. Es cierto que los tienen en un espacio limitado, pero el lugar es muy grande y el ámbito es 100% natural. Hay carteles informativos y los guías ponen mucho énfasis en que hay que respetar el silencio.

En medio de la isla, justo en el centro, están las famosas Colinas de Chocolate o Chocolate Hills. Es una formación geológica formada por, al menos, 1.268 colinas cubiertas de hierba verde que se vuelve marrón en la época seca. De ahí su nombre... parecen montañas de chocolate. Si váis con tiempo, aprovechad la visita para ver las terrazas de arrozales. Yo ya las había visto en Sapa (Vietnam) y preferí ver otras cosas de la isla. Las Chocolate Hills están muy preparadas para el turismo. Hay una plaza, no demasiado grande, donde aparcan los autobuses y los coches de los turistas y donde hay un edificio grande con mil productos de merchandising que sólo compramos los que somos de fuera. De esta plaza sale una escalera que sólo se puede subir a pie; es decir, no está preparada para la gente que tiene movilidad reducida. La mayoría de los colinas tienen una altura entre 20 y 50 metros. La más alta es de 150. Gracias a ello, desde el mirador de arriba se puede ver toda la extensión! Es un misterio cómo se formaron las colinas. Una de las leyendas más populares dice que dos gigantes lucharon durante días, tirándose piedras... (realmente, nos lo inventamos todo!). Los geólogos dicen que se trata de formaciones resistentes de piedra caliza marina colocada sobre barro (esta teoría me la creo más). Se pueden visitar todo el año; pero siempre desde el mirador. Me encantó.

Sipatan Twin Hanging Bridge son dos puentes colgantes (de 40 metros de largo) que cruzan el río Sipatan en el municipio de Sevilla. Un puente es de ida y otro de vuelta. El paso es individual. Inicialmente, se construyó con bambú y cuerda. Hoy día, han cambiado las cuerdas por cables de acero para garantizar la seguridad. Es una experiencia divertida que hace disfrutar de momentos de nervios (porque el puente se mueve bastante) en medio de la naturaleza. Si estuviera en mis manos, controlaría los accesos. Para mí, había demasiada gente. Una de las cosas que más me gustó es el color verde del río. Muy intenso.

Muy cerca, pero un poco más al sur, está Loboc River Cruise. Aquí cogí un barco para dar una vuelta por el río Loboc. Hay un embarcadero con muchas barcas. Todas ofrecen más o menos lo mismo; pero entre ellas hay diferencias. Hay algunas que son más exclusivas y otras son más de "turisteo". Recomiendo no dejarse llevar por la diferencia de precio. Ya que estáis aquí, valorad la diferencia entre buena comida vs mal comida, música a todo volumen vs cantantes en directo, compartir con 50 personas vs ir solo. Alquilamos una barca entera para nosotros. El paseo por el río es maravilloso. Palmeras gigantes que salen del agua hacen dar cuenta que tierra adentro está la selva. El agua es verde esmeralda. La tranquilidad es brutal. Otros barcos de madera se cruzan despacio, mientras se pueden ver niños que juegan en los columpios que se han hecho ellos mismos en las palmeras para lanzarse al río. Durante la vuelta, me di cuenta que por encima nuestro, pero a mucha altura, cruzaba una tirolina (tuve claro que sería la siguiente visita!). La comida en el barco es buenísima. Ligera, como casi toda la gastronomía asiática, y muy sabrosa. La vuelta llega hasta las cataratas Busay Falls. Son pequeñitas, pero tienen gracia. La única parada que hace el barco es un puesto (montado totalmente para los turistas) donde hay gente local bailando danzas tradicionales. Supongo que no hace falta que diga que bailé, ¿verdad?

En Loboc Ecotourism Adventure Park tuve una de las experiencias más espectaculares de mi vida. Subir a una tirolina a 150 metros de altura para recorrer 500 metros por encima del río Loboc y de la selva fue, sencillamente, brutal. No os voy a engañar... impresiona mucho. Está muy cerca de donde se cogen los barcos. Un recorrido se hace con la tirolina y el otro con una especie de telesilla. En la tirolina se va tumbada boca abajo. Los primeros minutos os aseguro que la adrenalina va a tope; después me relajé un poco y pude disfrutar más de las vistas. Hasta el final... que me volví a poner muy nerviosa al ver que el sistema de frenado era manual! Estaba en manos de un chico... y fue todo perfecto. Sensacional.

Las dos últimas visitas fueron a la Baclayon Church y la Blood Compact Shrine. Este último conmemora el trato de paz del español Miguel López de Legazpi con el cabecilla de Bohol Rajah Sikatuna y lo hicieron bebiendo la sangre del otro. Muy interesante, pero después de la tirolina todo me parecía poco.

Una isla fascinante que se ha recuperado del terremoto de 2013 y está mejor que nunca!

Si necesitáis y/o deseáis ayuda en la organización de la escapada, no dudéis en enviarme un mail!

Si queréis marchar a Filipinas con la tarjeta SIM ya comprada, la podéis solicitar en Holafly y obtendréis un 5% de descuento por venir de Raconets!

Duración:

Depende del tipo de visita que le quiera hacer.
Si os limitáis a ver las visitas mencionadas el post, tres días son suficientes. Si se quiere disfrutar del hotel y de las playas, yo lo alargaría al doble.


Niños

Sin problema.


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *